Agrupación Comandos Anfibios
Nacida en 1966, la Agrupación Comandos Anfibios de la Infantería de Marina de la Armada de la República Argentina es la forjadora de uno de los mejores combatientes de las fuerzas armadas de nuestro país
Raza de valientes: la Agrupación Comandos Anfibios cumplió 54 años. Nació en 1966 y, desde sus orígenes, lleva consigo la tenacidad y el sacrificio como principales valores de quienes la integran.
Según publica la Armada Argentina, mediante su órgano de difusión GacetaMarinera, la Agrupación Comandos Anfibios (APCA), una de las Fuerzas Especiales de la Armada Argentina, cumplió ayer 27 de abril del año 2020 54 años de existencia. Quienes dan el sí al Curso Comando Anfibio, realizan una instrucción donde el coraje y la valentía son factores determinantes. Cuando al superar cada desafío de la capacitación llegan a colocarse la boina que los identifica, pasan a ser hombres de una estirpe distinta, una raza de valientes.
Los Comandos Anfibios están preparados para enfrentar la complejidad de las más variadas operaciones; llevan adelante su accionar en cualquier ambiente geográfico y, muchas veces, con condiciones climatológicas extremas. De allí el manejo de técnicas y procedimientos particulares como también la utilización de material y equipos especiales.
Su historia se remonta a experiencias reales de la Segunda Guerra Mundial, donde los países participantes vieron la necesidad concreta de crear, adiestrar y utilizar unidades con capacidad anfibia para proyectar su poder naval hacia la tierra.
Basándose en esos conceptos, fue que la Armada Argentina determinó dentro del ya existente Cuerpo de Artillería de Costas, la adquisición de medios y equipos con los que la Brigada de Infantería de Marina N°1, creada en 1947, adiestró a sus hombres para el cumplimiento de su misión.
El paso del tiempo y el adiestramiento de esas unidades hicieron que se desarrollaran nuevas técnicas y se crearan métodos que permitieran cumplir con sus misiones y operar en el ambiente anfibio.
En 1952, en Mar del Plata, se ordenó instruir a un grupo específicamente en reconocimiento anfibio, y en 1966, mediante Disposición Nº 5/66 y sobre la base de los efectivos de la Compañía de Infantería de Marina Nº 7, se creó la Compañía de Exploración y Reconocimiento Anfibio a la que se le asignaron nuevas tareas y responsabilidades.
El prestigio adquirido por estas fracciones hizo que cada vez más integrantes de la Fuerza se sumaran a sus filas. Fue así que la cantidad de personal efectivo posibilitó la creación de la Compañía de Exploración y Reconocimiento Anfibio (CIER), que en 1970 se vio desdoblada en una Compañía de Reconocimiento Anfibio (CIRA) que permaneció en Mar del Plata y una Compañía de Exploración (CIEX) que fue trasladada a la Base Aeronaval Comandante Espora.
El 13 de noviembre de 1974, el entonces Comandante en Jefe de la Armada resolvió su cambio de denominación a la de Agrupación Comandos Anfibios.
El 2 de abril de 1982, la Agrupación Comandos Anfibios integró la Fuerza de Tareas Anfibia que intervino en la recuperación de las Islas Malvinas. Sus dos unidades de tareas fueron las primeras en alcanzar la playa a las 23 horas del 1 de abril y luego de una infiltración nocturna, capturaron el Cuartel de los Royal Marines en Moody Brook.
Sus hombres participaron de las acciones en la Casa del Gobernador, donde fue herido de muerte el Jefe de una de las unidades de tareas, el Capitán de Fragata (Post Mortem) Pedro Edgardo Giachino, primer caído durante la Guerra de Malvinas.