jueves, 16 de octubre de 2025

ARA: Contraalmirante Vicente Estanislao Montes (1864-1945)

Biografía: Vicealmirante Vicente Estanislao Montes (1864-1945)





Tengo la fortuna de ser bisnieto de Vicente Estanislao Montes (1864-1945) que fue uno de los hombres de la Armada de Guerra de fin del siglo XIX y primeras décadas del XX que se aventuraron en campañas de nueve meses de duración por año para hacer de la Argentina una nación orgullosa de su presencia marítima y austral. Fuerte, Soberana y Digna.
A estos hombres hechos de acero humano les debemos el haber construido palmo a palmo los límites con la hermana república de Chile, el haber remontado cada río del sur para estudiar sus aptitudes y ser artífices del progreso de una colonización pujante, próspera y feliz que llegó a la Patagonia a cumplir el sueño de la América que prometía. Nunca estuvieron solos ya que a su lado iban los misioneros Salesianos llevando el alma de la Fe en el único y verdadero Señor de la Historia.
Mi bisabuelo guiado por los indios lugareños llegó hasta el lago central de la isla de Tierra del Fuego al que denominó Fagnano en homenaje al sacerdote salesiano cuyo coraje y obra eran la causa de su reconocimiento entre machos paridores de una misma Patria. Tomando su cantimplora se acercó a la orilla y lo bautizó en el nombre del Padre, del Hijo y del Espiritu Santo.
A lo largo de la extensa carrera llegó a ser comandante de la II Escuadra Naval y de su nave insignia, el acorazado Garibaldi, y luego de la novel Fragata y buque escuela de la Armada Presidente Domingo Faustino Sarmiento. También fue agregado naval en el Reino Unido y Francia. Hacedor del Puerto Belgrano se retiró con el grado de Vicealmirante. Sentó las bases de la aviación naval, defensor a ultranza de la dignidad humana trabajó denodadamente por la Cruz Roja y para no andar con rodeos llegó hasta a hipotecar su casa para apoyar las campañas del partido político que había abrazado, la Unión Cívica Radical.
Fue un marino cabal que dio todo por su país, pero no era él sino la institución que integraba la dueña de los logros. Era la gloriosa Marina de Guerra equipada y en operaciones. Vivió como un marino y murió pobre como correspondía a un hombre de su talla.
La misma fuerza que sin medir costos fue en pleno a enfrentar la flota británica en el mar abierto durante la campaña de mayo de 1982 y que sólo una cuestión climática impidió lo que iba a ser la batalla naval sangrienta y determinante de la guerra a suerte y verdad.


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